Ansiedad

¿Sabías que los trastornos de ansiedad son los más frecuentes en las consultas? Se estima que más del 40% de la población sufre o ha sufrido ansiedad en algún momento de su vida.

Actualmente, muchas personas acuden a sus médicos de cabecera debido a la ansiedad; sin embargo, éstos apenas tienen formación en salud mental, y el número de psicólogos en la sanidad pública es muy reducido, por lo que no pueden cubrir la necesidad de la gente.

Pero... ¿Qué es exactamente la ansiedad?
¿Por qué hay tantos casos? ¿Se puede controlar?


La ansiedad aparece de diferentes maneras: por un lado, en cuanto al cuerpo, podemos ver que nuestro ritmo cardíaco se acelera, podemos llegar a sentir que se nos va a salir el corazón. Algunas personas sudan, pueden sentir las manos sudorosas. Es también habitual no poder contener las ganas de orinar cada poco tiempo.

Por otro lado, mentalmente, pensamos que se nos viene el mundo encima, que algo malo va a suceder, anticipamos cosas malas que aún no han ocurrido pero que podrían pasar, en definitiva, se trata de un pensamiento catastrófico.

Emocionalmente, nos sentimos agobiados, en los casos más graves podemos sentir que nos vamos a morir, lo cual se conoce como ataque de pánico.

La ansiedad puede adoptar diferentes formas: ansiedad general (cuando estamos constantemente en ese estado de ansiedad sin causa aparente), ansiedad social (cuando evitamos salir de casa o el contacto con personas), ataques de pánico (cuando sentimos que nos vamos a morir), agorafobia (angustia en situaciones en la que nos sentimos desprotegidos o sin poder hacer nada), trastorno obsesivo compulsivo (cuando hacemos algo concreto repetidas veces, como lavarnos las manos o comprobar cosas) o fobias específicas (cuando tenemos miedo o rechazo hacia algo concreto: arañas, tiburones, perros…).

 

¿Por qué hay tantos casos?

Lo que ocurre realmente con la ansiedad es que se trata de la punta del iceberg, es decir, la ansiedad es lo primero que vemos.

Normalmente, cuando exploramos nuestras vidas, descubrimos que las cosas están mucho más relacionadas de lo que creemos. Con la ansiedad ocurre lo mismo, no es nada habitual sentir ansiedad espontáneamente, sin motivo aparente, generalmente hay una causa, que puede ser próxima (estoy ansioso porque me siento mal en el trabajo) pero también puede que llevemos tiempo sufriendo y sin pedir ayuda, tirando hacia adelante y convenciéndonos de que podemos con todo. Ésta es una solución a corto plazo, ya que el ser humano es capaz de salir adelante de situaciones muy difíciles dejando a un lado el dolor, pero eso no quiere decir que esa herida esté curada.

La ansiedad es la manera que tiene nuestro cuerpo de avisarnos de que algo no va bien. Hay problemas muy diferentes que detectamos mediante la ansiedad. Por eso mismo, nosotros no aplicamos técnicas generales, iguales para todas las personas, sino que optamos por un tratamiento individualizado, exploramos la historia de cada persona para entender de dónde viene la ansiedad.

 

¿Se puede controlar?

Sí. Los tratamientos para la ansiedad cuentan con mucho respaldo científico, se ha visto en numerosas ocasiones que son efectivos.

Hay que señalar que esta ansiedad se puede trabajar superficialmente (centrarse en no sentir ansiedad en este momento), para lo cual también existen muchas estrategias y herramientas (fármacos, técnicas de respiración, yoga), o de manera profunda (ir al origen de la ansiedad para no volver a sentirme así).

Nosotros recomendamos un abordaje profundo, pues ello nos proporciona un mayor conocimiento de nosotros/as mismo/as. Siendo prácticos, trabajar así requiere más tiempo en comparación con el tiempo necesario para aprender algunos ejercicios de relajación. Por esto mismo, hay personas que prefieren optar por un tratamiento breve y genérico, en lugar de uno personalizado y más duradero. Esa decisión queda en tus manos, si tienes interés en reducir la ansiedad, clicka aquí para pedir tu primera sesión gratuita sin ningún compromiso.